Con una masiva participación de vecinos y también de autoridades y figuras políticas, quedó inaugurado el Memorial y Museo de Malvinas, sobre la avenida Costanera.

POR DANIEL MARZAL – 06/09/2025 – www.rionegro.com.ar

Miles de barilochenses participaron en el acto. Foto: Marcelo Martinez
Un marco multitudinario llenó de color y calor popular en la tarde de hoy la inauguración del Memorial construido a orillas del lago Nahuel Huapi para homenajear a los caídos en la guerra de 1982 y reafirmar la soberanía nacional sobre las islas Malvinas, la Antártida y el Atlántico Sur.
El edificio recrea la proa de una embarcación y alberga un museo, cuyo concepto y “guión” va más allá de la gesta bélica y pretende documentar “los 500 años de historia” que acumula Malvinas y los derechos argentinos sobre ese territorio insular y el océano circundante, según se encargó de subrayar el director de Veteranos de Río Negro, Rubén Pablós.

El gobernador Alberto Weretilneck destacó la importancia de sostener la memoria de los excombatientes que “dieron la vida” en defensa de las islas. Recordó que él mismo es de clase 62, quedó eximido del servicio militar por número bajo, pero por una cuestión generacional bien pudo haber estado “en el General Belgrano o en alguna de las batallas” de la guerra desatada hace 43 años contra las fuerzas británicas.
El reconocimiento a los excombatientes fue la motivación central de los miles de barilochenses que acudieron a la convocatoria, favorecida por un clima primaveral. Un desfile náutico encabezado por el Modesta Victoria y el paso de dos aviones Pampa III y un Hércules de la Fuerza Aérea fueron parte del programa. Los discursos y el corte de cintas se continuaron hasta avanzada la tarde con un festival artístico.
Gente de toda edad colmó la terraza del Memorial, que funciona como una plaza seca, y también las explanadas laterales, el estacionamiento lindante y la misma playa pública, en el afán de no perderse detalle. Hubo abundancia de iconografía malvinera, puestos que vendían pines, fotos y recuerdos y hasta una gran bandera que decía “gracias hermanos peruanos”, por el recordado apoyo de aquel país durante la guerra.
Weretilneck dijo que el Memorial de Bariloche “tiene dos grandes sentidos: el reconocimiento, el honor y la gloria de los excombatientes, y también el de vencer la indiferencia y el olvido, para que Malvinas esté siempre presente”.
Reivindicó la decisión de invertir lo producido por “los impuestos de los rionegrinos para este homenaje” y dijo que las obras cuestan millones, y desde lo material “no son hierro, son plásticos, son vidrios y cerámicos. Pero también tienen alma. A las obras como esta, que tienen alma, no hay con qué darles”.
Pablós rememoró que la idea inicial del Memorial y Museo de Malvinas data de hace 15 años y recordó que con el primer plano tentativo los ayudó el arquitecto Carlos Valeri, cuando era concejal de Bariloche, y antes de ser ministro de Obras Públicas.
Educar y difundir conocimiento
Como lo aclaró varias veces durante el proceso de construcción, Pablós dijo que el objetivo no se limitaba a homenajear a quienes dieron la vida por las islas, sino ir más allá y recrear un museo, cuyo contenido se elaboró con participación del Instituto Antártico, el Instituto Geográfico Militar, Invap y el ministerio de Educación. Refirió que la idea es que sirva para difundir conocimiento y que las escuelas de Bariloche y de la provincia lo tomen como destino de visitas educativas.
También está previsto que los más de 100 mil egresados que recibe Bariloche cada año pasen por el lugar. “El objetivo es promover la reflexión y hacerles entender a todos lo que es la soberanía y lo que es la patria”, aseguró Pablós.
A la hora de los mensajes también tuvo su momento el brigadier general Xavier Isaac, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, quien definió a Malvinas como “una gesta irrenunciable”, y resaltó el homenaje que merecían los pilotos y soldados que “fueron capaces de hacer lo que hicieron en desventaja tecnológica, y con mucha bravura”.
Isaac destacó que los veteranos “son héroes” y que la masividad de la concurrencia al acto demostró que “hoy Bariloche es más malvinera que nunca”.
El intendente Walter Cortés destacó que el espacio inaugurado en plena Costanera céntrica “no es uno más”. Resaltó que el perfil del edificio “está pensado como la proa de un barco que avanza hacia el futuro”. Dejó sentado que la propuesta desarrollada por impulso de los veteranos de guerra “no es solo un museo, es un testimonio vivo y una escuela para la comunidad”.
Un acto de alta repercusión política
La presentación en sociedad del Memorial de Malvinas generó fuerte interés entre los barilochenses que se acercaron en gran número hasta el complejo para seguir en detalle la ceremonia, pero también funcionó como un imán para una gran parte del arco político, que no quiso faltar a la cita.
Además del gobernador Weretilneck y el intendente Cortés, que tenían obligaciones institucionales, estuvieron en el acto varios ministros provinciales, legisladores, la diputada Lorena Villaverde, la senadora barilochense Silvina García Larraburu y los exintendentes Marcelo Cascón y María Martini.
Llamó la atención la participación de la exgobernadora Arabela Carreras, quien no suele concurrir a actos públicos. Weretilneck la nombró especialmente y destacó su aporte para garantizar el presupuesto y la ejecución de la obra, que comenzó durante su mandato.
También estuvieron presentes unos 150 excombatientes de distintos puntos del país. Entre las ausencias más notorias se destacó la del vicegobernador Pedro Pesatti, quien había seguido de cerca todo el proceso y siempre tuvo vínculo estrecho con los veteranos de Malvinas.
Entre los momentos emotivos estuvo el testimonio de un niño cordobés de 9 años, nieto de un excombatiente, quien relató cómo se interesó desde muy chico por lo ocurrido en la guerra, recopiló información y se identificó con la causa de Malvinas.
El Memorial y Museo quedó instalado como un espacio público de alta exposición, que funcionará como atractivo para los barilochenses y también para los turistas.
Demandó una inversión de 1.688 millones de pesos, aportados en su totalidad por el Estado provincial. El edificio cuenta con 350 metros cubiertos, que albergan el museo, oficinas, depósito y una sala apta para actos culturales.
En el exterior, hacia el lago, se complementa con una vistosa parquización, una fuente de agua y dos pilares donde están inscriptos los nombres de los 649 soldados caídos en la guerra de 1982.
Como parte del complejo fue instalado sobre la orilla del Nahuel Huapi un avión Mirage III, montado sobre una torre y en una simulación de vuelo rasante, como los que realizaban los pilotos durante la guerra para no ser interceptados.

Foto: Marcelo Martinez