Entre 1974 y 1982, en el marco de los acuerdos bajo salvaguardia de soberanía con el Reino Unido, maestras argentinas se establecen en las Islas Malvinas a fin de enseñar el español, a pedido y por interés de los propios malvinenses.
Así fue que en marzo de 1974 llegó a la cartera educativa del gobierno de Juan Perón el siguiente pedido:
“Se necesitan Maestras de castellano para los chicos kelpers”.
Luego de un largo período de selección, María Fernanda Cañas y su hermana fueron las elegidas para ir un año a las Islas